A mis amigos.
Hoy me encuentro frente al mar
mirando su lejanía,
admirando el infinito
que me roba la alegría.
Hoy recuerdo con tristeza
a esa valiente mujer,
que vive en mi pensamiento
y que no volveré a ver.
En el lugar donde está
tal vez sienta mi tristeza,
la nostalgia que me aqueja
mis deseos de llorar.
Si ella pudiera abrazarme
como treinta años atrás,
trataría de consolarme
para que no sufra más.
Siento una pena tan honda
que no puedo respirar,
al recordar su figura
tan débil de tanto amar.
Sé que el tiempo ya no vuelve
que nada da marcha atrás,
que se alejó para siempre
y que nunca volverá.
La recuerdo con tristeza
con un inmenso pesar,
por no haber aprovechado
el tiempo que quedó atrás.
Por eso les digo amigos
si quieren a su mamá
demuéstrenle su cariño
antes que sea tarde ya.
No pierdan el tiempo amigos
y quieran recuperar,
esos momentos perdidos
cuando no se pueda ya.
Pues nadie puede decirnos
qué hay en el más allá,
si volveremos a verlas
un día en la eternidad.